En San Diego no paseamos mucho por la ciudad, sólo comimos unos tacos en el barrio de La Joya y visitamos el portaviones Midway, ahora transformado en museo. Fue una visita muy interesante, ver cómo convivían más de 3500 personas en ese laberinto de habitaciones, cómo se lanzaba y aterrizaban los aviones en tan pequeña pista, a los chicos les encantó, se subieron a cuánto avión había. Los guías eran soldados ya retirados, orgullosos de mostrarnos todo aquello.
Unos 60 km al norte esta Carlsbad, allí visitamos Legoland, la ciudad en miniatura hecha con legos y el acuario que está al lado. Cuando sacamos las entradas pensamos que el acuario era el famoso SeaWorld, que también está en Orlado. Pero cuando llegamos nos dimos cuenta que es un mini acuario denominado SeaLife, de parecidos, sólo el nombre.
El viaje ya se estaba acabando y tal vez por eso, cada vez nos poníamos más ansiosos. A Pato cualquier ruido de la camio lo preocupaba. Sólo faltaban unos 2500 km hasta Houston, puerto de embarque para Panchita!